La flor eléctrica o Acmella oleracea tiene un uso cada vez más extendido en todo el mundo por sus características, y gana especial importancia en el mundo de la gastronomía. Esta planta tiene unas propiedades anestesiantes que han interesado mucho al mundo de la alta cocina por las experiencias que puede ofrecer a los consumidores de manera segura y curiosa. Te contamos todas las curiosidades y cuidados sobre esta planta y dónde puedes encontrarla.
Los que ya la han probado, aseguran que la planta deja un adormecimiento momentáneo en la boca y la lengua, algo que hace disfrutar de manera diferente de cada sabor dentro de la gastronomía. Además, tiene un aspecto más que curioso que cada vez llama la atención de más gente. Veamos de dónde viene y qué cuidados necesita, así podrás empezar a experimentar con ella en tu jardín.
Origen y qué es la flor eléctrica
La flor eléctrica proviene de una planta que se encuentra de manera original en Sudamérica, es común encontrarla en sitios como Brasil y Perú, pero su uso está cada vez más extendido en el mundo. En algunos países cuenta con una larga tradición por sus beneficios y propiedades, siendo de gran utilidad como analgésico, sobre todo para enfermedades en la boca.
Se desarrolla en climas especialmente cálidos y húmedos, si el ambiente es muy seco, no acaba de desarrollarse con tanta facilidad. El sustrato de esta planta tiene que estar húmedo y su mejor época para ella es el verano. Tolera muy bien el sol directo sin marchitarse y también la semisombra, pero es esencial que cuente con luz solar para poder desarrollarse.
Normalmente se siembra a inicios de verano, y se tiene que ser constante con los riegos, para que siempre tenga tierra húmeda a su alrededor. Pertenece a la familia de las Asteraceae, así como las margaritas, manzanillas y los girasoles, pero su aspecto es muy diferente al de estas flores más comunes.
La flor eléctrica en cocina
Esta flor, también conocida como Berro del Pará, ha sembrado la controversia en el mundo de la gastronomía. En los últimos años ha ganado mucha fama en el mundo de la alta cocina, considerándose una delicatessen por las sensaciones que ofrece, ya que contiene principios anestesiantes y al comerla, las sensaciones en la boca impactan de manera muy curiosa en la boca.
Primero se nota un gusto ácido que activa las glándulas salivares y al poco tiempo, se empieza a notar su efecto analgésico en la lengua, el paladar y las encías. Provoca un adormecimiento general en la boca. Algunos adoran la sensación y aprovechan para combinarlo con otros sabores intensos.
Empieza a tener mucha presencia en el mundo de la gastronomía y ya se puede encontrar en algunos platos, sobre todo ensaladas o cócteles. Usada en la medida correcta, puede ser una manera curiosa de experimentar de nuevo los sabores.
Te invitamos a leer nuestro artículo sobre flores comestibles, encontrarás otras especies muy interesantes para añadir un toque de color y sabor a tus recetas favoritas.
Mejores platos y recetas con la flor eléctrica
Donde más se encuentra en la actualidad es en cócteles, normalmente con otros sabores tropicales que complementan e intensifican la acidez inicial de esta flor. Es un gran aliado para potenciar la frescura de las bebidas si se pone en la medida justa, y al ser ácido, ayuda a notar el dulce con más intensidad. Puedes combinar un cóctel que tenga esta flor con un dulce frutal para notar una explosión de sabores en el paladar.
Normalmente, la flor se espolvorea en los platos para adormecer los labios mientras se disfruta de la comida, una sensación interesante si se usa en la justa medida. Además, sus hojas y tallos se consumen de manera regular en ensaladas en los países de donde son originarias, aportan un toque fresco y ácido que contrasta con los otros ingredientes de la ensalada a la perfección.
Cuidados de la flor eléctrica para su cultivo
Si quieres cultivar la flor eléctrica en tu huerto o jardín, pero no sabes por dónde empezar, has llegado al sitio correcto. Estos son los cuidados de la flor eléctrica más esenciales que tendrás que tener en cuenta para que crezca saludable y fuerte.
Temperatura y ubicación
Esta flor crece en climas cálidos, por lo que no se lleva bien con el frío y las heladas. Deberás mantenerla tapada si empieza a refrescar para que no se muera. Además, lo mejor será encontrarle un lugar donde pueda disfrutar de sol directo o de semisombra, así te asegurarás de que recibe suficientes horas de sol para crecer.
Si la planta tiene sol directo durante muchas horas, deberás evitar el sustrato que se quede seco, la humedad es clave para que prospere. Al sembrar esta planta, no deberás enterrar las semillas en la tierra, tienes que dejarlas encima para que reciban la luz solar de manera directa.
Riego
El riego tiene que ser constante para esta planta, la tierra nunca debe quedarse seca,. En las épocas de más calor deberás regarla a diario para asegurar un crecimiento saludable. La humedad es un básico. No debes regarla con mucha agua, lo mejor será riegos cortos, pero frecuentes para mantener la tierra húmeda, pero no encharcada.
Suelo
El suelo en el que se siembre esta planta tiene que ser rico y si es posible añadir elementos que ayuden a mantener la humedad en la zona. Es esencial encontrar un equilibrio entre el sustrato que se use y el agua de los riegos, así como la humedad es su mejor aliada, no se lleva nada bien con las zonas encharcadas. Si la tierra no drena bien el exceso de agua, las raíces se pudrirán y la planta acabará muriendo.
Lo mejor será tocar la tierra y regar cuando ésta empiece a secar. Si la tienes en maceta, asegúrate de que tenga suficiente espacio para drenar el agua. También deberás evitar poner platos que acumulen el agua debajo, así crearás el mejor hogar para estas plantas.