Tipos de sustratos para plantas y sus características

Publicado por Lucía Poyo Vallina en

Si tienes gran interés en cómo cultivar una planta, es primordial que conozcas ciertos términos, entre ellos, los tipos de sustratos que existen. Los cuales forman parte fundamental del proceso de siembra de las mismas. Pero ¿qué es el sustrato de las plantas? y ¿por qué los sustratos tienen diversos tipos y características?

Descubrir y aprender a utilizarlos es fundamental para que entiendas el proceso de cultivo de una planta. Pues estos, le ofrecen a las plantas diversas propiedades diferentes que pueden resultar adecuadas para algunas, pero no para todas. Así que, quédate ¡Te explicamos cuáles son los diferentes tipos de sustratos disponibles y sus características principales!

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¿Qué es el sustrato de las plantas?

El sustrato de las plantas se refiere a la tierra que es usada para sembrar o cultivar las plantas. Independientemente de dónde se encuentren cultivadas, el sustrato siempre tendrá propiedades y características diferentes. Pues, a diferencia del suelo natural, un sustrato se prepara con el objetivo de aportar a tus plantas un adecuado desarrollo y crecimiento.

Por lo cual, aspectos como la materia orgánica presente, la retención de humedad y de agua, el nivel de pH y el grado de compactación son muy influyentes. Estos materiales sólidos, suelen variar bastante en su composición dependiendo del ecosistema en donde se encuentren.

Además, los sustratos son más ligeros y permiten que el agua pueda drenarse con mayor facilidad hasta llegar a las raíces de las plantas. 

Tipos de sustratos para plantas ornamentales y de jardín

Tipos de sustratos según sus propiedades

Los tipos de sustratos que utilices para sembrar tus plantas, deben adaptarse lo máximo posible al entorno en donde, de forma primitiva, crecen y se desarrollan. De modo que, logres obtener unos resultados de calidad con la mejor vida vegetal disponible. Por ello, es importante tener en cuenta los tipos de sustratos de acuerdo a sus propiedades. Estos suelen clasificarse en dos variedades:

Sustratos químicamente inertes

Estos sustratos son únicamente una base para la planta. Es decir, no intervienen en absoluto en los aportes de nutrientes o fijación de los mismos. Por ello, si vas a utilizar este tipo de sustrato, es fundamental integrar a parte los nutrientes necesarios para las plantas.

Sustratos químicamente activos

En este caso, los sustratos químicamente activos, además de actuar como soporte para las plantas, ofrecen también nutrientes esenciales. Asimismo, ayudan con la retención de los mismos logrando almacenar los restos para liberarlos cuando la planta lo requiera.

Tipos de sustratos naturales

Los tipos de sustratos naturales, son aquellos que se encuentran compuestos por materiales orgánicos de origen natural. Entre ellos, puedes encontrar los siguientes:

Sustratos con fibra de coco

Uno de los sustratos para semilleros más usados es el compuesto por la fibra de coco. Presenta una gran ligereza y es importante lavarla bien antes de emplearla para eliminar las sales que pueda contener. También puedes combinarla con sustratos compuestos de turba.

Tipos de sustratos naturales que se utilizan en los semilleros

Agua

Todas las plantas requieren como ingrediente principal el agua para poder sobrevivir. Suele añadirse en forma de riego junto al sustrato principal, aunque en ocasiones, ésta pasa a ser el único ingrediente como sustrato, como sucede en la agricultura hidropónica.

Turbas

Las turbas se clasifican en rubias y negras, y son el resultado de la descomposición natural vegetal por el transcurso del tiempo. Las turbas rubias cuentan con la peculiaridad de ser más ricas en materia orgánica. Por lo tanto, tienen una mejor capacidad para retener el agua y una mayor aireación, con lo cual es usual utilizar ambas turbas mezcladas.

Arena

Si deseas una gran capacidad de retención media de agua, utiliza sustrato con arenas, que a pesar de que se compactan con el tiempo, pueden durar muchísimo. Gracias a su granulometría (0.5 - 2 mm), son perfectas para mezclarlas con turbas. Por ende, son muy empleadas en sustratos para macetas.

Corteza de pino

Este tipo de sustrato es ligero, con una gran aireación y porosidad, siendo sutilmente ácido. Se origina mayormente de la industria maderera y puede ser utilizado tanto compostado como crudo, aunque el primer caso es más recomendable.

Tierras volcánicas

Este tipo de sustrato natural puede resultar algo complicado de trabajar por su heterogeneidad, aunque con buenos conocimientos ¡nada es imposible!

Al usar material con componentes de origen volcánico sin tratar, nos encontramos ante un sustrato poroso que además tienen un pH ligeramente ácido, con lo cual, proporciona una retención baja de agua y una gran aireación.

Gravas

Puedes encontrar gravas con un diámetro entre 5 - 15 mm, siendo las de cuarzo y piedra pómez las más utilizadas como sustratos para las plantas.

Tipos de sustratos artificiales

Los sustratos artificiales son los que contienen una serie de propiedades determinadas, las cuales tienen el objetivo de ayudar a equilibrar los sustratos naturales. Entre ellos, puedes encontrar los siguientes:

Sustratos compuestos con arcilla expandida

Son nódulos de tipo arcilloso que se pueden obtener por encima de los 100 grados. Los cuales, proporcionan unas bolas aparentemente duras de tamaños variados (2 - 10 mm de diámetro). Éstas tienen una gran capacidad de aireación y retienen poca agua. Además, pueden mezclarse con turbas si se necesita mejorar el drenaje de un sustrato.

Perlita

La perlita es un sustrato poco denso proveniente de la roca sílice volcánica con una formidable capacidad de retención de agua y su pH es neutro. El inconveniente de la perlita es que su vida útil es limitada, y por eso suele mezclarse con turbas, por ejemplo, y así complementar sus propiedades.

Vermiculita

Aunque es similar a la perlita, los granos son más finos y tienen otro origen. La vermiculita tiene una buena capacidad de aireación y retención de agua. No obstante, puede compactarse por el tiempo.

Poliestireno expandido

Éste es de una densidad inmensamente baja, lo cual proporciona buen aireamiento y es ideal si necesitas poca retención de agua. Es un plástico blanco grumoso cortado en trozos de 4 mm y 12 mm. Para mejorar la aireación del mismo, se puede mezclar con sustratos como la turba que son compactos.

Lana de roca

Es una fusión de carbón de coke, rocas basálticas y calcáreas, como resultado tenemos un material inerte, homogéneo y muy manipulable con cualidades que permiten una buena retención de agua y aireamiento. Si vas a usarla, debes considerar que tiene una durabilidad de aproximadamente 3 años.

Imaginabas que cultivar plantas naturales era algo más sencillo, ¿no? Pues ya ves que cada una de ellas requiere de tiempo y dedicación además de un sustrato correcto. De esta manera, obtendrás plantas saludables que puedan desarrollarse y crecer de forma adecuada.

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